El dolor de muelas es una de las molestias más intensas y desesperantes que podemos experimentar, a tal grado que la persona te pide que se la saques. Puede aparecer de forma repentina y afectar la alimentación, el sueño y hasta el estado de ánimo. Aunque algunos métodos caseros pueden aliviarlo temporalmente, en la mayoría de los casos requiere atención dental para resolver la causa.
Las causas de dolor de muelas son, en primer lugar, las caries, que son lesiones en los dientes causadas por bacterias que transforman los azúcares de los alimentos en ácidos. Estos ácidos desgastan el esmalte dental y, con el tiempo, pueden avanzar hacia la dentina, que es la capa debajo del esmalte y llegar al nervio del diente que está en el centro, provocando dolor más intenso y puede aparecer inflamación o infección.
Otras causas son las infecciones dentales, donde las bacterias entran por las caries que son profundas, una fisura, un golpe o una encía lesionada y hasta el hueso, provocando inflamación, dolor y pus o abscesos que son colecciones de pus. Encías inflamadas por enfermedad periodontal, o sea que los tejidos que sostienen los dientes se afectan por una infección u otras. Fracturas dentales por golpes o morder alimentos duros. Bruxismo o rechinar los dientes, casi siempre cuando estás dormido, los músculos de las mandíbulas duelen, los dientes se desgastan, pueden fracturarse, se vuelven más sensibles al calor y frío, puede dar dolor de cabeza, cuello y hombros, así como inflamación de la articulación de la mandíbula.
También otra causa son los problemas en la mandíbula o los senos paranasales que irradian dolor. Los senos paranasales son cavidades llenas de aire ubicadas dentro de los huesos del cráneo y la cara, que están conectadas con las fosas nasales. Su función principal es aligerar el peso del cráneo, humidificar el aire que respiramos y ayudar a la resonancia de la voz.
Remedios caseros para aliviar el dolor mientras vas donde el dentista, y que no sustituyen el tratamiento profesional son 1-Enjuague con agua tibia y sal, disolviendo media cucharadita de sal en un vaso de agua tibia y enjuagar 30 segundos. Ayuda a reducir la inflamación y limpiar la zona. 2-Aplicar frío en la mejilla con una bolsa de hielo envuelta en tela durante 15 minutos disminuye la inflamación y adormece la zona. 3-Hilo dental, usarlo con cuidado para eliminar restos de comida atrapados entre dientes. 4. Medicamentos para el dolor. 5-Mantener la cabeza elevada al dormir puede reducir el dolor nocturno.
Lo que no debes hacer es colocar aspirina directamente sobre la muela o encía, pues puede quemar los tejidos. Automedicarte con antibióticos sin receta, puede agravar la situación y generar resistencia bacteriana. Ignorar el dolor, podría empeorar y convertirse en una infección más grave.
Ir al dentista de inmediato cuando sientas dolor intenso que dura más de 1–2 días, inflamación visible en la cara o las encías, fiebre o malestar general y dificultad para abrir la boca o tragar.
El dolor de muelas debe ser evaluado por un dentista para identificar la causa y aplicar el tratamiento adecuado. La extracción es solo el último recurso cuando el diente no puede salvarse.
No conviene sacarse una muela solo por dolor, ya que este puede ser reversible, la extracción es definitiva y puede causar sangrado, infección o inflamación. Además, el dolor no siempre indica la causa; puede provenir de encías, nervios o mandíbula. Ignorar el dolor de muelas es riesgoso, busca ayuda y evita infecciones, pérdida del diente y problemas de salud graves.